Hay aficiones que pasan de padres a hijos… y otras que saltan de hijos a padres. Cuando una chica de 15 años pidió por su cumpleaños una moto quad, nada hacía presagiar que iba a lograr extender la afición a toda la familia; padres, marido e hija, incluidos. Ahora, 12 años después, salir a la montaña con sus respectivos ATV se ha convertido en una rutina familiar y en una fábrica de buenos recuerdos.

A la hora de ampliar su colección de motos clásicas, este ingeniero informático jienense lo tiene claro: prima sobre todo la antigüedad y la estética. Pero para su día a día, los criterios cambian. Para desplazarse al trabajo, visitar a sus padres e incluso ir de curvas o asistir a concentraciones los fines de semana, recurre a su Super Dink 350, de la que se declara un ferviente admirador.

Conoce la historia de este economista de 49 años que vive y trabaja en el centro de Madrid y consigue reunirse con su padre a diario y ofrecerle la compañía y la sensación de bienestar que necesita gracias a la moto. Lo que en principio fue pensado para un uso puntual, ahora se ha convertido en algo imprescindible; pero, no solo para este momento especial del día, sino para todo.

Le señalan de "desertora", de broma, como si se hubiera cambiado de bando. Esta veterinaria de 33 años se ha criado rodeada de motos y ha tenido ya varias, todas de segunda mano. Pero esta vez quería una moto nueva, elegante, cómoda, con tecnología y segura. Y su elección inteligente ha sido: el scooter Xciting S 400, el buque insignia KYMCO, una moto conectada al teléfono móvil, de 400 cc, diseño deportivo y con ABS. "Es perfecta para trabajar a diario en el centro de Madrid".

Es su capricho premium, funcional y seguro. Este fisioterapeuta ha crecido con KYMCO; lo que en un principio se trataba de una necesidad de movilidad (empezó con el superventas Agility City 125) se ha ido transformando en una de sus pasiones. Acaba de estrenar un Xciting S 400 con tecnología Noodoe, tras su paso por el Grand Dink 300, su forma de movilidad cotidiana, segura y elegante. 

“¿Y de qué me sirve tanta seguridad en el hospital si luego me meto en el metro?". Esta reflexión le llevó a Cristina a moverse en coche, pero pronto, la dificultad de aparcamiento y su elevado coste le hicieron buscar fórmulas más eficientes: el nuevo Super Dink 350 TCS le permite hacer frente de una manera segura a la segunda ola de la pandemia. 

Todo le sonríe a su alrededor desde hace unas semanas. Acaba de descubrir un mundo nuevo, y está encantada, ilusionada… ¡Está feliz! Al instante se dibuja en ella una sonrisa de oreja a oreja cuando le mencionas la palabra moto.

Cuando dedicas buena parte de tu vida a oficiar bodas y casar parejas de todo el mundo, famosos incluso, podría decirse que sabes detectar una buena unión en cuanto la ves. Y eso es precisamente lo que le ocurrió a este gibraltareño de 51 años cuando se montó por primera vez en su AK 550. Desde entonces, su pasión por este megascooter y por la marca KYMCO le ha llevado, cual superhéroe, a tener dos identidades: funcionario del Peñón los días laborables y 'KYMCO Kid' los fines de semana.